domingo, 20 de diciembre de 2020

"... Hay una secta de hombres implacables

que con su odio colectivo a todas las mujeres ilustres, antiguas y modernas, se han armado de la sátira, del desprecio y de la calumnia". "La Sigea". Carolina Coronado.

En el Madrid lluvioso de ayer, los pensionistas salieron a las calles mientras la fila interminable del establecimiento lotero más famoso daba que pensar si es que ya no creemos en nada de lo que nos dicen (fácil porque es imposible que una medida dure un rato) o es que, de repente, hemos descubierto que es imposible vivir sin apretujones, sin charleta o de sentirnos igual que antes cuando llenábamos las bolsas de camisetas o pijamas que no necesitábamos pero que nos hacía sentirnos ricos gastando la paga navideña.

A medida que avanzan los días y los meses, comparezco a los políticos de toda sigla y condición porque ya están marcados lo hayan hecho, bien, mal o regular y muchos deberán volver al bufete, a la ferretería o a buscarse "curro" después de tanto años de "habitar" en el Congreso. Y entiendo pero no comparto que no peguen el "cerrojazo" en estas fiestas en los reinos briboneros de a cuatro ya que, desde mi punto de vista, tienen miedo a un estallido social y de ahí la retahíla de apelar a la responsabilidad individual.

En cuanto a este rincón


Una decisión

Una película


Y