miércoles, 23 de diciembre de 2020

"... Ardió la noche como vieja tea

 con la absurda avaricia de la muerte / con su luto distante y pegajoso / y un rencor resabiado y carcomido / descargó como lluvia en el desierto...". Francisca Aguirre.

El Consejo de Ministros de estos reinos briboneros de a cuatro ha aprobado ayudas económicas para la hostelería que, a duras penas, soporta cierres, aperturas y vuelta a empezar pero que según los representantes de ese importante colectivo no palían la caída de ingresos por lo que muchos establecimiento no volverán a abrir sus puertas.

Prácticamente todos los sectores atraviesan serias dificultades y el cansancio, el hastío y el hartazgo se va apoderando de cada uno nosotros, preocupados por afrontar una situación que parece no tener fin. 

Poco que añadir salvo que hay unas riendas, las de la protección individual, que podemos mantener para que, por lo menos, no contagiemos ni expandamos. 

De paso, eliminamos falsas amistades, apariencias, manipulaciones y compromisos.

En cuanto a este rincón del Mediterráneo, tan suyo

las banderas ondean a media asta y no suenan villancicos por el fallecimiento de Ascensión López, concejala socialista.

Una película


Y