martes, 21 de julio de 2020

"... Y lo que fui no sé: quizás lo sepa

cuando este cuerpo vuelva a abandonarme / y yo vuelva a nacer desde mis labios / despegado al calor que los concibe / Mas hoy, por fin, he detenido al día / le he destrozado el corazón al tiempo / aunque dentro de mi mi como una daga / siento al ángel crecer, que me atormenta". Emilio Prados.

La euforia de la salida del confinamiento ha dado paso a retrocesos, a cierres de locales nocturnos, a la cultura vapuleada por aquello del aforo, a los contagios masivos, a las pérdidas económicas y a los fallecimientos aunque, afortunadamente, el número de éstos es infinitamente menor que en los días terribles.

Cierto es que mantener distancia física es muy difícil y que todos los colectivos tienen derecho a manifestarse. Desde los independentistas catalanes a la alegría de los seguidores de los equipos de fútbol pero las imágenes de los desafueros se multiplican por mil como aquellas que nos traen a miembros de altas Instituciones, políticos, etc... sin mascarilla o metiéndola en el bolsillo del terno por muy impecable que éste sea o en el bolso.

En otro orden, 

https://www.elconfidencial.com/espana/2020-07-20/ordenadores-barcenas-audiencia-absuelve-pp_2689023/

En cuanto a este rincón del Mediterráneo, 


La gente tiende a apelotonarse. Había sitio pero...



Además y a pesar de que la policía recuerda el uso de los tapabocas y, en ocasiones, multa no se cumple normativa. Mucho imbécil aprovecha calles transversales, etc... para jugarse la vida y de paso, reventar, la de quienes cumplen.

Tampoco estaría de más que quien sea recuerde al gremio de taxistas y trabajadores municipales que están obligados como todo quisque a utilizarlos.

https://lamarinaplaza.com/2020/07/20/compromis-pide-una-consulta-ciudadana-en-calp-para-solucionar-el-conflicto-de-la-edad-de-los-festeros/

Una lectura



y hoy debería haber actuado en Barcelona.



                                                   -Pepa Terrón-