lunes, 9 de marzo de 2020

Traspié


En ocasiones, son insignificantes, en otras quebrantan huesos en la caída y entre el dolor y la humillación provocan una risa incontrolable al que lo sufre y ¡cómo no! a algún que otro viandante.

Bien es cierto que hay otros más sutiles -cometidos por la ingenuidad de creer que determinados especímenes cambian- que dejan poso de amargura por la condición ajena y no propia aunque, a fuerza de sinceridad, forman parte ineludible e inevitablemente de la condición humana y una vez pasada la sorpresa, te hacen sentir vivo permitiendo analizar con la mayor objetividad posible las luces y las sombras de protagonistas y secundarios ya que hasta en eso no siempre los repartos de la comedia son justos.

Cuando esto ocurre, hay que releer a los autores que forman parte de los años pretéritos, acariciar las páginas ajadas con signos ya más que evidentes de humedad, analizar si los párrafos y versos subrayados siguen vigentes y ratificar que desprenderse de ellos sería olvidar a amigos, enemigos, traiciones, amores, deslealtades o complicidades.

En definitiva, la vida misma a la que me he dedicado en estos meses de "ausencia". Imposible elegir entre Pirandello quien aborda en "La excluída" la maledicencia y las desigualdades de género o Calderón en El gran Teatro del Mundo: "... Sólo no vestiré al pobre /porque es papel de desnudo/ porque ninguno después se queje de que no tuvo para hacer bien su papel todo el adorno que pudo / pues el que bien no lo hiciere será por defecto suyo, no mío..."

Por hoy, bajo el telón pero antes, una hermosa canción, banda sonora de "Amanezca" cuya presentación ha tenido lugar el 6 de marzo en la madrileña Residencia de Estudiantes.

https://www.youtube.com/watch?v=SmQ70sezOVo


                                            -Pepa Terrón-