jueves, 9 de agosto de 2018

El viejo profesor


Las gentes de mi generación llamábamos así a Enrique Tierno Galván. Tras el lío organizado por el fichaje laboral de Begoña Gómez, compañera de Pedro Sánchez, presidente de los reinos briboneros de a cuatro, me ha venido a las entendederas una respuesta de quien fuera alcalde de Madrid cuando fue preguntado sobre corrupción: "Los bolsillos de los gobernantes deben ser de cristal".

Hay situaciones en las que son imprescindibles coherencia, transparencia, ética y si me apuran estética, independientemente de valías profesionales.

En cuanto a "la endogamia te espera" más conocida como "Calp t'enamora",  ayer viví durante un par de minutos un hecho nada agradable. Un ciudadano senegalés intentaba vender a una familia una especie de pareo-toalla-manta, fijándose el precio en 14 euros. Ella le entregó un billete de 20 pero al primero le faltaba 1 euro. Inútilmente trató de explicarlo y el resultado fue que él se levantó de la arena y le tiró la prenda a la cara con malos modos. Lo garantizo.

Finalmente, logró el cambio a través de otro compañero y se realizó la operación.

Camino de mi casa con la sensación de que no avanzamos nada puesto que cierto es que los comerciantes tienen razón cuando hablan de que ellos pagan impuestos pero quienes se ganan la vida de ese modo, no tienen otra salida ya que no cuentan con papeles siendo el último eslabón de la cadena, me topé con los "agradables" visitantes que lucen carnes por zonas que no son primera línea de playa.





Una película




y





                                           -Pepa Terrón-