con los gorriones y zorzales / porque avanza la onda de la noche / y su ausencia de luz / y su implacable huésped / de suaves pasos, el peligro.". Rosa Chacel.
Mi tarde de ayer transcurría -como prácticamente todas desde que el maldito nos trastocó- entre mi afán de continuar aprendiendo y el sonido de fondo de la televisión que mostraba, amén de otras irresponsabilidades, las de padres y madres apelotonados en Valencia y Lugo con la finalidad de ver a los magos.
De pronto, unas hordas incontroladas, alentadas por un individuo soez y a quien todos los improperios que conozcamos no bastarían para definir, marchaban con el fin -y lo lograron durante un tiempo que se hizo interminable- de tomar El Capitolio.
Así de frágil es el mundo que hemos construido y en donde todo se puede ir al garete en un pispás por un mal perdedor.
En cuanto a este rincón mediterráneo, diez minutos de paseo y bicicletas, perros en el mar, gente sin mascarilla y fumando
Una lectura
Una película
Y