Sólo salimos en los momentos sublimes...". Marguerite Yourcenar.
Que así sea ya que, entre amenazas y pintadas en la estatua de Largo Caballero en el madrileño Paseo de la Castellana, confinamientos, angustias, miedos, incertidumbres, manifestaciones a favor o en contra -prietas las filas ya que, amén de energúmenos e insolidarios son retrógrados- y enfados, las cifras de fallecidos sobrecogen el alma.
Me dirán que hay países que no están mejor pero no es consuelo sino la ratificación de que un bicho puede asolar a un mundo que se consideraba "el más mejor".
En cuanto a este rincón del Mediterráneo, tan suyo
algunos comercios "aguantan" el puente pero después cerrojazo. Triste invierno para todos, sin distinciones, fantasmas que no escuchamos bien y que no nos reconocemos a cuenta de las mascarillas.
Una lectura
Añoranzas
Y
-Pepa Terrón-