La euforia de la salida del confinamiento ha dado paso a retrocesos, a cierres de locales nocturnos, a la cultura vapuleada por aquello del aforo, a los contagios masivos, a las pérdidas económicas y a los fallecimientos aunque, afortunadamente, el número de éstos es infinitamente menor que en los días terribles.
Cierto es que mantener distancia física es muy difícil y que todos los colectivos tienen derecho a manifestarse. Desde los independentistas catalanes a la alegría de los seguidores de los equipos de fútbol pero las imágenes de los desafueros se multiplican por mil como aquellas que nos traen a miembros de altas Instituciones, políticos, etc... sin mascarilla o metiéndola en el bolsillo del terno por muy impecable que éste sea o en el bolso.
En otro orden,
https://www.elconfidencial.com/espana/2020-07-20/ordenadores-barcenas-audiencia-absuelve-pp_2689023/
En cuanto a este rincón del Mediterráneo,
La gente tiende a apelotonarse. Había sitio pero...
Además y a pesar de que la policía recuerda el uso de los tapabocas y, en ocasiones, multa no se cumple normativa. Mucho imbécil aprovecha calles transversales, etc... para jugarse la vida y de paso, reventar, la de quienes cumplen.
Tampoco estaría de más que quien sea recuerde al gremio de taxistas y trabajadores municipales que están obligados como todo quisque a utilizarlos.
https://lamarinaplaza.com/2020/07/20/compromis-pide-una-consulta-ciudadana-en-calp-para-solucionar-el-conflicto-de-la-edad-de-los-festeros/
Una lectura
y hoy debería haber actuado en Barcelona.
-Pepa Terrón-