Descubrí ¡Que lástima! recién abandonada la niñez gracias a un padre que perdí pronto pero que me enseñó a sentir la poesía.
Millones de personas responsables acatamos las medidas de precaución a la vez que otros muchos deben salir a trabajar poniendo en riesgo su vida y las de sus familias. Los de más allá, irresponsables y amorales rompen la disciplina.
En definitiva, lo mejor y lo peor del ser humano en una prueba durísima a la que jamás pensamos que deberíamos enfrentarnos.
En cuanto a este rincón del Mediterráneo, su Ayuntamiento, por fin, habilita el pabellón Domingo Crespo para acoger a las personas sin hogar.
Un espacio al que regresar. Mientras
https://www.museopicassomalaga.org/exposiciones-temporales
Una lectura
y en memoria del querido Chema Candela y de los tiempos compartidos en los que aprendí de fútbol y admiré su generosidad y entrega
-Pepa Terrón-